Cànaves cree que deja "la federación en buenas manos", pero reconoce que al nuevo presidente electo tiene una gran tarea por hacer. "Lo más importante es que sepa representarnos de la mejor manera antes las administraciones y defienda nuestros derechos. Le deseo que no se tope con muchos conflictos entre confraries, pues eso es lo peor que nos puede pasar".
Bonnín, por su parte, ha asegurado que el trabajo de su equipo "será continuista con lo llevado a cabo hasta la fecha. Si el sector está unido, podemos llegar a donde queramos. Y hoy, en este acto de toma de posesión, la federación ha demostrado que está más unida que nunca".
El nuevo presidente ha recordado que "yo sigo siendo pescador. Salgo al mar todos los días. Si las confraries nos llevamos bien entre nosotros, la federación funcionará y viceversa".
