La terapia asistida con animales utiliza el vínculo persona-animal como parte integral del proceso de tratamiento, ya que su finalidad, además de garantizar un tiempo agradable y proporcionar bienestar a personas mayores, es ir más allá apostando por los numerosos beneficios que esta terapia puede aportar, aparte de la alegría, ilusión y ganas de verlos e interactuar con ellos.
Entre estos beneficios se encuentra la mejora de la autoestima, ya que los perros muestran afecto sin importar la edad o salud de la persona, por lo que ayudan a paliar el sentimiento de soledad. También se consigue despertar el interés de la persona mayor a través de los movimientos y juegos del perro, y ello conlleva mejoras en el estado de ánimo de las personas a la vez que estimula la mente a través del uso de los sentidos (vista, oído, tacto...).
La terapia con perros también activa la memoria, ya que estos contactos con mascotas pueden traer recuerdos de viejos tiempos; y fomenta la actividad física, al ser el contacto
con un perro una oportunidad para jugar y desarrollar las habilidades físicas de la persona
mayor mientras pasa un rato divertido.
Se comienza normalmente con un primer acercamiento o toma de contacto entre el perro y las personas mayores, en los que, muchas veces, las personas mayores recuerdan la tenencia de un perro o animal de compañía en el pasado y lo expresan o lo cuentan. Este
hecho es importante ya que activa el sentimiento de cariño y bienestar, olvidando las dolencias y los pensamientos negativos.
En la Llar las sesiones se hacen semanalmente en dos grupos: uno de personas más asistidas y uno más autónomas. Los grupos de personas van rotando de semana en semana con la intención de que participen cuantas más personas usuarias mejor. La perra
que participa en la terapia se llama Samba, y es una Golden Retriever de 2 años.
El perro de terapia es un animal específicamente entrenado para integrarse dentro de un
programa terapéutico o educativo. Razas como el Golden Retriever o el Labrador son las
más utilizadas por su particular carácter. Por norma general son perros pacientes, agradecidos, fáciles de enseñar al tener buena predisposición al aprendizaje, además de
inteligentes y cariñosos.
Los perros que se utilizan en las terapias son elegidos a través de una selección específica, y son sanos, seguros y están entrenados para poder llevar a cabo este tipo de actividades. Tienen una constitución y edad apropiadas, y poseen las aptitudes y habilidades adecuadas para que su participación sea beneficiosa.
La terapia con perros en la Llar de Calvià está subvencionada por Obra Social "la Caixa", que ha hecho entrega de un cheque al Ajuntament. En la entrega han estado el alcalde de
Calvià, Alfonso Rodríguez Badal, la tenienta de alcalde de Cohesión y Bienestar Social, Nati Francés, la concejala de personas mayores, Mari Carmen Rojano, la gerente de la Llar, María del Carmen Pérez; y por parte de Obra Social “la Caixa” ha entregado el cheque el director de instituciones de Balears, Silvio Sarralde.
