Asisa ha comunicado a los pacientes que tienen que continuar con tratamientos de larga duración, así como a los que se tienen que someter a pruebas diagnósticas y analíticas, que para poder llevarlas a cabo tendrán que trasladarse desde Eivissa y Menorca hasta Mallorca.
Además, los enfermos y personas mayores que en estos momentos siguen sus tratamientos a través de Asisa, incluidos los diagnosticados de cáncer, se verán totalmente desatendidos, ya que dada su realidad médica, ninguna otra compañía los querrá asegurar.
La salida de Asisa de Eivissa y Menorca significa el incumplimiento de las condiciones firmadas y aceptadas de asistencia a los mutualistas funcionarios de Muface, Isfas y Mugeju. Un contrato estatal que obliga a prestar asistencia médica y clínica a lo largo y ancho de toda la geografía española.