En un comunicado, la patronal ha reiterado que el Ejecutivo balear podría mostrar de esta forma su apoyo al colectivo tras la quiebra del touroperador turístico británico, un cese que, según han destacado, ha supuesto un "impacto global muy importante".
Según han añadido, la eliminación del impuesto turístico supondría una disminución aparente de los ingresos de la Comunidad Autónoma, pero se transformaría en un "mensaje positivo al mercado turístico" y, a la larga, mejoraría los ingresos de toda la sociedad balear, han opinado.
La patronal ha insistido en que cuidar la fuente de ingresos de Balears "es cuidar los ingresos de la Comunidad Autónoma y es un momento apropiado para corregir un error económico y una injusticia hacia los visitantes".
Finalmente, ha apuntado que "es de justicia eliminar o reducir muy significativamente las cuantías a ingresar por el impuesto en 2018 a quienes se han visto afectados por la quiebra del grupo Thomas Cook".