La inversión pública, prevista en un millón de euros, dotará a la sanidad de un gran activo, según ha explicado. Y es que, si se consigue dejar de fumar con el Champix, se disminuirá la incidencia de enfermedades como el cáncer de pulmón, de colón, y otras afecciones derivadas del tabaquismo.
La adicción al tabaco es, según el presidente de la AECC, una de las "drogas duras" que necesitan tratamiento. Así, con la ayuda del medicamento y diferentes herramientas, como 'apps' para dejar de fumar, la asistencia de psiconcólogos, etc, dejar de fumar es un objetivo asumible.
Demográficamente, según ha explicado Cortés, la incidencia del tabaquismo pone en un lugar de riesgo a las mujeres más jóvenes, que empiezan a fumar a muy temprana edad. Para ello, desde la AECC recomiendan tratarse y, en lo posible, no comenzar a fumar.