El 17 de agosto de 2017 Barcelona vivió uno de sus días más negros. Una furgoneta recorrió más de 500 metros por La Rambla de la ciudad dejando 16 muertos y 155 heridos de 34 nacionalidades distintas.
En su segundo aniversario, unos 70 familiares y víctimas han participado en los actos de homenaje situándose en primera línea y tras el minuto de silencio, han depositado flores en cuatro maceteros situados en el centro de La Rambla, en el mismo lugar donde el pasado año se colocó el memorial.
En el acto de homenaje ha participado el presidente de la Generalitat de Catalunya, Quim torra; el presidente del Parlament, Roger Torrent; y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau; así como también el ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska; y el presidente del Senado, Manel Cruz, entre otros.