"Los 60.000 cruceristas que a lo largo de este semana hacen escala y pasean por Palma han ayudado a cambiar una tendencia negativa durante este mes de agosto en muchos pequeños y medianos comerciantes de la ciudad", han señalado en una nota de prensa.
Desde Pimeco han celebrado estas cifras "en una temporada en que las ventas habían bajado hasta alrededor de un 18%". El presidente de Pimeco, Toni Fuster, ha señalado que, aunque "algunos lo quieren demonizar", el turismo de cruceros "es vital para el tejido comercial y empresarial de Palma".
Según los datos facilitados por Pimeco, este tipo de turismo "genera más de 6.000 puestos de trabajo y se calcula que aporta un Valor Añadido Bruto de 256 millones de euros".
Con todo, Fuster ha remarcado que "no todos los comercios de Palma se ven beneficiados por este aumento de visitantes", puesto que no llegan a los barrios de extrarradio. Por ello, el presidente de Pimeco ha apostado por "seguir trabajando para recuperar las ventas entre los clientes locales" que "buscan producto de calidad y la atención cercana y cálida que garantiza el pequeño y mediano comercio".
