En declaraciones a Europa Press, Reus ha asegurado que las reservas de este año siguen las previsiones esperadas. "Hasta Semana Santa ha ido muy bien. Mayo y junio han sido más flojos, y en julio estamos trabajando con el 75 y el 80 por ciento de la flota".
Si bien la horquilla de precios varía en función de la empresa de alquiler, el precio medio es de unos 35 euros por día. Por periodo de tiempo alquilado, la media se sitúa en torno a los cuatro días.
Por otra parte, Reus ha señalado que la competencia creciente de países como Túnez, Egipto o Grecia ha provocado algunos cambios en la política de ventas. "Hemos tenido que bajar los precios para competir con estos países", ha apuntado Reus, que ha explicado que por precios mucho menores, en un paisaje y un clima similar al de archipiélago, los turistas pueden obtener los mismos servicios.
Sin embargo, el presidente de una de las principales asociaciones de alquiler de coches en Baleares ha apuntado que, pese a la competencia, el objetivo del sector en Baleares es ahora "fomentar la calidad, más que la cantidad".
"Los últimos años hubo un crecimiento notorio, ahora nos estamos dando cuenta que esta temporada no será como las dos anteriores, pero nos conviene mejorar la calidad. Se está haciendo un esfuerzo enorme en el sector para que esto sea así", ha explicado Reus.
En este punto, el presidente de la Aevab ha subrayado que "el futuro pasa por la calidad", por lo que puntos conflictivos y que disminuyen la calidad del turismo en Baleares, "como ciertos puntos de la zona de Magaluf o de Playa de Palma, deben erradicarse".
En este sentido, Reus ha declarado que uno de los esfuerzos del sector para obtener esta calidad, fue la firma de un código de buenas prácticas con la Dirección General de Consumo del Govern, un documento para evitar, entre otros aspectos, que ciertas empresas ofrecieran coches a menos de cinco euros por día.
"Hubo un tiempo en que había mucha publicidad que ofertaba coches a tres y cuatro euros al día, cuando en la realidad luego no era así", ha contado Reus, que ha explicado que se trataba de una publicidad que podría calificarse de "no leal" porque luego había muchos cargos que "hinchaban" el precio ofertado en un principio.
Con la firma del documento las empresas declaran que están inscritas en el registro de regulación y clasificación de las empresas y establecimientos turísticos y se obligan a actuar de forma "leal" con los clientes consumidores.
En concreto, se comprometen a ofrecer a los consumidores, en la información que realice en Internet u otros medios, una reserva de contrato de alquiler del vehículo, con las prestaciones básicas propias de este tipo de contratos, "por un precio completo que será el precio final si el consumidor no contrata ninguna prestación adicional", según el Govern.
Una vez la administración ha comprobado el cumplimiento de los compromisos adquiridos por parte de la compañía, la Dirección General de Consumo le otorga un sello de empresa avalada.