Ante la Audiencia, Matas ya había reconocido haber cometido los delitos de prevaricación y fraude a la administración en el marco de esta causa pero no había aceptado el de tráfico de influencias. Ahora, la pena que era de cuatro meses, asciende a diez meses.
Así, la Sala considera que Matas está detrás de las actuaciones para manipular el concurso de adjudicación del centro hospitalario con el objetivo de beneficiar de manera ilícita a OHL; adjudicación que fue frustrada por su filtración a la prensa.
La sentencia subraya que "todo el proceso obedeció a la orden de hacer efectivo el deseo del presidente para que la concesión se adjudicara a OHL": "Todas las actuaciones descritas, tanto las que hacían avanzar en la adjudicación hacia OHL como aquellas otras, tras la filtración a la prensa, cuyo objetivo ya fuera tapar la maniobra o ya fuera conseguir que fuera exitosa, se realizaron con la conciencia de que se estaban ejecutando las órdenes del presidente Matas".
El escrito también indica que Matas "es poderoso, no tiene miedo y realiza actuaciones por su cuenta" y que, tal como sostiene la Fiscalía, "el tráfico de influencias fue pluridireccional": sobre el órgano de contratación, que era el director general del Ibsalut; sobre la decisión de la Mesa -no solo sobre la decisión final sino casi sobre el día a día de la misma-; sobre las valoraciones de Global PM, que fue la destinataria del sobre con las prescripciones técnicas que harían ganadora la oferta de OHL.
En concreto, se da también por probado que Matas, con "el único propósito de ostentar un control directo" sobre el desarrollo del procedimiento de adjudicación del concurso del Hospital y "garantizar su influencia", tanto sobre el curso del proceso, como sobre la valoración de las ofertas que se iban a presentar y procurarse la posibilidad de intervenir en su resultado, en marzo de 2006, decidió contratar a Global PM pues era de "plena confianza, ya que había prestado numerosos servicios de consultoría tanto al Govern como al Ayuntamiento de Palma".
En la sentencia también se condena a la exconsellera de Salud, Ana María Castillo, al director del IbSalut, Sergio Beltrán, y a Jesús Peinado por prevaricación y fraude. Tras llegar a un acuerdo con el Ministerio Fiscal han sido condenados a penas menores de cárcel que han sido sustituidas por multa.
Cabe recordar que Matas lleva en prisión desde junio del año pasado con motivo de su condena por el 'caso Nóos'. El también exministro de Medio Ambiente fue condenado a tres años y ocho meses de prisión y siete años de inhabilitación especial.
Antes, Matas ya había cumplido una pena de nueve meses de cárcel en el marco de la primera pieza que fue juzgada dentro del 'caso Palma Arena' por la contratación irregular de un articulista para la redacción de sus discursos.