A lo largo de la mañana, es prácticamente imposible encontrar aparcamiento en Cala Galdana. Los vecinos y residentes optan por estacionar sus vehículos en este parking y andar los dos kilómetros que lo separan de Cala Macarella, pues desde hace dos años está cerrada al tránsito rodado.
Los turistas han explicado que les ha costado bastante encontrar sitio en el aparcamiento y se han quejado el tener que andar los dos kilómetros para llegar a Macarella.
Sobre la falta de mantenimiento, residentes y trabajadores han explicado que la zona de la urbanización que pertenece a Ciutadella está especialmente en mal estado. La alcaldesa de Ferreries se ha comprometido a hablar con la alcaldesa de Ciutadella para encontrar una solución a esta falta de mantenimiento.