Según ha informado la Benemérita en un comunicado, la investigación se inició hace varias semanas, cuando los investigadores de la Guardia Civil detectaron un incremento importante de denuncias de turistas a quienes les habían sustraído pertenencias personales.
Los detenidos se desplegaban en grupo por la zona del citado mirador, en el que se tiene constancia de una gran concurrencia de carteristas, que aprovechan la numerosa presencia de turistas para cometer los ilícitos.
Asimismo, una vez que se apoderaban de las carteras, cogían el dinero desechando todo lo demás. Los delincuentes elegían a sus víctimas en base a unos parámetros muy definidos tales como que fueran extranjeros y de avanzada edad.
En el registro efectuado en uno de los vehículos utilizados por los delincuentes, los agentes encontraron 8.000 euros en metálico que se hallaban ocultos en un habitáculo bajo el asiento, así mismo se les intervino varias tarjetas de crédito sustraídas.