Así lo ha informado en declaraciones a los medios el portavoz de comunicación del Instituto Armando, Paco Molina, quien, asimismo, ha añadido que los investigadores tardaron dos días en encontrar la droga en el velero, ya que estaba "muy bien camuflada". "Se localizó en un baño de popa, habían construido un falso tabique con un tablero marino forrado y pintado y pasaba totalmente desapercibido, desmontaron el barco entero antes de encontrar la cocaína", ha explicado.
Asimismo, Molina ha explicado que tras la droga tiene una "elevada pureza" porque "proviene de Sudamérica", de la zona del Caribe. Sin embargo, no ha especificado más detalles sobre la procedencia, ya que el caso se encuentra aún bajo secreto de sumario.
Cabe recordar que el pasado domingo frente a las costas de Málaga, efectivos del Servicio Marítimo de la Guardia Civil, con apoyo de medios aéreos, interceptaron al velero que se dirigía a Baleares que había sido controlado por una aeronave tras sospechar que podría llevar droga.
En términos más concretos, se detectó en la Isla Mauricio y se inició un Plan de control para no perder la embarcación hasta culminar con la incautación de 600 kilogramos de cocaína. "Es la mayor incautación de cocaína en Balears", ha sostenido Molina.
Durante la actuación se detuvieron a los dos tripulantes, un ciudadano lituano con antecedentes de tráfico de drogas y otro español residente en Eivissa al que no constan antecedentes como presuntos responsables de un delito de tráfico de drogas.
Los detenidos pasaron a disposición judicial y se encuentran en estos momentos ingresados en prisión en Málaga y serán trasladados a Balears. La droga ha sido transportada en Baleares.
Según ha recordado el despliegue del operativo fue coordinado desde el Centro de Coordinación de Vigilancia Marítima de la Guardia Civil en Madrid y se ha desarrollado por el Equipo contra la Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de Baleares en colaboración con los servicios aduaneros franceses, efectivos del Servicio Marítimo de la Guardia Civil, Comandancia de Málaga y el Centro de Coordinación y Vigilancia Marítima.
La actuación se enmarca en la operación 'Indalo', liderada por la Guardia Civil y coordinada por la agencia europea de fronteras exteriores Frontex, contexto en el que participaba una avión de la Policía y Guardia de fronteras de Estonia que realizó el seguimiento del velero desde el aire antes del abordaje.