Así se ha expresado Font en un acto en Son Dureta en el que ha estado acompañado de la número 2 de la formación al Parlament, Lina Pons, donde el cabeza de lista ha prometido trabajar "para garantizar que las personas mayores o con enfermedades crónicas reciban una atención cercana y adecuada".
Además, el PI propone elaborar un plan específico de recursos intermedios, como hospitales de día, destinados a pacientes frágiles, con el fin de prevenir la dependencia y fomentar el envejecimiento saludable; y programas de cuidados paliativos y atención domiciliaria en los procesos de final de la vida.
Asimismo, Font ha asegurado que si gobierna revisará el mapa de infraestructuras sanitarias para prestar atención 24 horas, "lo más cerca posible de su lugar de residencia". En este apartado, el candidato ha alertado de que hay municipios con una fuerte carga poblacional, especialmente en los meses de verano, "que sólo disponen de unidades básicas de salud".
En cuanto a las listas de espera, El PI se propone impulsar medidas específicas "para conseguir que ningún paciente espere más de 60 días para una consulta o prueba diagnóstica o 180 para una intervención quirúrgica", tal como establece el Decreto de Garantía de Demora.
En esta línea, el partido plantea campañas de sensibilización y de corresponsabilidad de la población hacia las consecuencias que tienen las incomparecencias a las citas médicas para el propio sistema y para otros enfermos.
El PI también se ha comprometido a promover la libre elección de especialistas en pediatría o ginecología y a reforzar especialidades como alergología y geriatría, "que encuentran lejos de la ratio recomendada".
Según Font, estas propuestas "no serán posibles sin la implicación de los profesionales sanitarios", por lo que ha incidido en la necesidad de fomentar medidas de fidelización de los trabajadores sanitarios, como el pago del 100% de la carrera profesional a los interinos de la sanidad pública.
El candidato se ha comprometido a hacer extensivo el pago de este complemento salarial a todos los interinos -no solamente a los médicos- del sistema público de salud con una retroactividad de cuatro años. "Sabemos que este pago implica un importantísimo esfuerzo presupuestario, pero no es otra cosa que reconocer el derecho de estos trabajadores", ha apostillado.