Según ha informado la Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca en un comunicado, el hallazgo se ha realizado en el marco de un programa piloto, iniciado a principios de este año, para el Servicio de Protección de Especies de la Conselleria, que tiene como objetivo localizar y preservar ejemplares en el Mediterráneo.
El nácar sufre actualmente una epidemia de mortandad extrema que, en solo tres años, lo ha extinguido prácticamente de las costas españolas, se va extendiendo por todo el Mediterráneo y pone en serio riesgo la pervivencia de la especie.
En Baleares, los últimos dos años, se han detectado media docena de ejemplares que, aparentemente, han resistido el ataque del parásito que provoca este episodio de extinción masiva.
Esta cantidad, aunque representa una cantidad ínfima del número de nácares que había en aguas del archipiélago, comporta una esperanza con vistas a la recuperación de la especie en el futuro.
Algunos de estos ejemplares ya han sido trasladados a lugares más seguros, con unas condiciones que minimicen los riesgos que, más allá del parásito, afectan a la especie, como la recolección ilegal, la contaminación, el impacto de anclas o los depredadores naturales.
El último ejemplar se trasladó, con éxito, a aguas de Cabrera, el pasado día 29 de abril, coincidiendo con la conmemoración del aniversario del Parque Nacional.
El proyecto piloto cuenta con el asesoramiento científico del COB-IEO y estará en marcha hasta el mes de noviembre.
Desde la Conselleria se hace un llamamiento a pescadores, navegantes y a todo el mundo que bucee en aguas de Baleares para que comuniquen inmediatamente la localización de algún ejemplar vivo.