El primero de ellos en diciembre de 2018 en Granada de donde habría sustraído dos televisores y el segundo, al que no llegó a acceder, en un establecimiento deportivo sito en Maó. En ambos casos el individuo acudió acompañado de un perro de raza chihuahua.
La primera denuncia se recibió en diciembre de 2018 cuando el propietario de un bar sito en la zona centro de Granada denunció que a media noche un varón había accedido al interior de su establecimiento tras forzar un candado y se había llevado dos televisores de gran tamaño mientras estaba acompañado de un chihuahua.
Policías de la Comisaría Provincial de Granada obtuvieron la grabación de las cámaras de seguridad del local donde comprobaron la veracidad de los hechos denunciados e iniciaron las investigaciones.
El pasado mes de marzo se recibió otra denuncia, esta vez de la Comisaría de Maó en la que el propietario de un establecimiento deportivo denunciaba que, a media noche, un varón acompañado de un perro había intentado entrar en su local tras forzar la cerradura de la puerta de acceso.
Agentes de la Comisaría de Maó recabaron también en esta ocasión las imágenes del establecimiento e iniciaron gestiones para la identificación del varón.
Fruto de las investigaciones policiales realizadas el varón fue identificado, detenido y puesto a disposición de la autoridad judicial por policías del Grupo de Robos de Granada.
