Según ha recordado el Consistorio, la contaminación se ha producido durante las obras ejecutadas por el Ministerio de Transición Ecológica para la conexión de las estaciones de bombeo del paseo marítimo con el nuevo emisario.
El Ayuntamiento ha afirmado que no tuvo conocimiento previo de las obras y, por lo tanto, no pudo adoptar ninguna medida de precaución.
Tras conocer los hechos, decidió realizar analíticas en el agua que han dado un alto contenido de 'E.colis' en la zona del antiguo emisario.
En concreto, el tramo cerrado va desde la zona del antiguo emisario hasta la mitad de la playa. El resto es apto para el baño, aunque se recomienda prudencia, según el Consistorio.
El vertido dejó de producirse este viernes por la tarde, aunque se seguirán practicando análisis para constatar el estado del agua y no se abrirá la playa hasta que estas analíticas den los resultados adecuados.