Así ha informado CCOO a través de un comunicado en el que han detallado que las condiciones de trabajo del colectivo, con camas cada vez más grandes, carros muy pesados, jornadas sin descansos y una media de 20-25 habitaciones al día, son elementos que obligan a las camareras a presentar un elevado consumo de fármacos y psicofármacos para paliar dolores musculares y rebajar los niveles de ansiedad.
La iniciativa 'Tus derechos, la mejor medicina', en la que se recogen conclusiones y entrevistas en profundidad a camareras de piso, médicos, sindicatos o servicios de prevención, revela que las trabajadoras que limpian los hoteles realizan un "policonsumo" de fármacos debido a los efectos secundarios de algunos medicamentos.
De acuerdo a CCOO, los fármacos más consumidos son relajantes musculares, analgésicos o antiinflamatorios para aliviar el dolor muscular; ansiolíticos para reducir el estrés y la ansiedad; y los protectores gástricos que, por los efectos secundarios de los anteriores fármacos.
La campaña expone que la mayor parte de los fármacos consumidos por las camareras de piso para paliar el dolos muscular no son recetados por un profesional ya que, según ha sostenido CCOO, se los recomiendan y proporcionan unas a otras. Además, el sindicato ha resaltado los reconocimientos de las enfermedades profesionales como el síndrome del túnel carpiano, la bursitis y epicondilitis del colectivo de camareras de piso.
Finalmente, han reclamado que todas las camareras de piso estén dentro del convenio de hostelería, el aumento de inspecciones laborales, la realización de una Guía Práctica de Salud Laboral y la elaboración de un estudio de tiempos adecuado en el reparto de habitaciones además de la puesta en marcha de acciones preventivas sobre riesgos identificados, como camas con ruedas, material ergonómico o reconocimientos médicos específicos.