Deportes
Tiempo de lectura: 1 minuto

Efecto Mazinger

Seguramente sepáis bien de qué os hablo hoy. Tal vez no todos lo llamemos como "efecto Mazinger", pero estoy segura que os vais a identificar con lo que os cuento.

Mi amiga Pilar tenía un hermano pequeño, Paco. Su padre, al ser piloto, viajaba mucho a Nueva York. En uno de esos viajes le trajo a Paco un muñeco Mazinger pequeño. El niño no cabía en sí de gozo.

Al poco tiempo, su padre viendo la alegría de su hijo con el muñeco le trajo un Mazinger mucho más grande. Paco estaba ilusionadísimo. De hecho, dejó de jugar con el juguete pequeño. Su madre, a sabiendas que al vecinito también le gustaba Mazinger, se lo regaló.

Y entonces se produjo el temido "efecto Mazinger": querer recuperar algo que ya no tenemos. Darle un valor exagerado.

El "efecto Mazinger" es aplicable a todo tipo de relaciones. Así que, ya sabéis, una vez hayáis roto una relación, recordad en todo momento por qué lo hicisteis y no caigáis en la trampa del temido "efecto Mazinger".

¡Espero que os guste mi reflexión de hoy!

Actualizado: 14 de marzo de 2022 , , , ,

Noticias relacionadas

Comentarios

No hay comentarios

Enviar un comentario

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este formulario recopila tu nombre, tu correo electrónico y el contenido para que podamos realizar un seguimiento de los comentarios dejados en la web. Para más información, revisa nuestra política de privacidad, donde encontrarás más información sobre dónde, cómo y por qué almacenamos tus datos.

magnifiercrossmenuchevron-down
linkedin facebook pinterest youtube rss twitter instagram facebook-blank rss-blank linkedin-blank pinterest youtube twitter instagram