Según ha informado la Conselleria en un comunicado, Vidal ha acudido al lugar acompañado del director general de Endesa en Balears, Martí Ribas, y Antoni Muñoz, del GOB.
Este nuevo espacio, con una superficie de cuatro hectáreas y una profundidad superior al metro, está destinado a convertirse en un lugar clave del Parque Natural, tanto con respecto a la mejora del estado hídrico y recuperación de hábitats de la mayor zona húmeda de Balears como para la observación de aves acuáticas y la alimentación de numerosas especies autóctonas de la zona.
Las obras de dragado se iniciaron a finales del año pasado y en estos momentos ya se han retirado más de 50.000 m3 de sedimentos, que han sido depositados en los alrededores de la laguna en forma de diques anchos donde el próximo invierno se ha previsto sembrar olmos resistentes a la grafiosis, chopos blancos y otras plantas propias de los bosques de ribera.
Vidal ha destacado la incorporación de este nuevo ambiente de aguas fondas al conjunto del Parque Natural y su valor como hábitat ya que será el más grande de sus características dentro del Parque Natural. También ha destacado que será la primera infraestructura de este tipo en el término municipal de Sa Pobla.
La finca donde se ubica la laguna ocupa unas 30 hectáreas justo al límite más occidental del Parque Natural y es propiedad de Endesa. En el 2016 la compañía firmó un acuerdo de custodia del territorio (ACT) con la Conselleria y el GOB.
En aquel ACT, que tiene como objetivo principal la mejora del estado de conservación de las especies y la restauración ecológica de los hábitats presentes, se marcaron toda una serie de actuaciones y proyectas a realizar, entre los cuales ya destacaban la creación, por dragado, de una gran laguna de aguas hondas y la ubicación de una plataforma elevada de observación de fauna, que formaría parte del itinerario público que discurre por aquella zona.
La laguna está conectada en toda una serie de acequias y canales, lo cual posibilitará que las aguas de la laguna se renueven de manera adecuada y permitan así una mayor presencia de flora y fauna acuáticas.
De hecho, durante los meses que ha durado el dragado ya se han podido contemplar muchas especies, e incluso se ha detectado el notacanto, un pequeño pez de agua dulce que únicamente se encuentra presente en ciertos lugares de la Albufera que disponen de aguas de muy buena calidad, y que, por lo tanto, se encuentra amenazado.
También se convertirá en un buen lugar de alimentación de Myotis capaccinii y otros murciélagos protegidos, anguilas, mújoles, notacantos, ranas, tortugas de agua y gran cantidad de invertebrados acuáticos, y contribuirá así a enriquecer las poblaciones de todas estas especies.
Además, se espera que la laguna pueda recibir pronto las aguas de las Fonts Ufanes, gracias a una derivación incluida en un proyecto que cuenta con financiación del impuesto de turismo sostenible, y así ayudará a mejorar el estado hídrico de toda la cara oeste de la Albufera y de algunos de sus hábitats, como el de los mansegars.
Finalmente, se espera, en el futuro más inmediato, continuar nuevas actuaciones en la zona, como la ya comentada de creación de nuevos bosques de ribera y también la puesta en funcionamiento de una estación de anillado de aves migratorias o el soterramiento de un tendido eléctrico próximo.
En este sentido, a parte de esta actuación, hay que añadir otras como la construcción de una nueva Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) en Sa Pobla; obras de mejora en la EDAR de Muro y un proyecto, financiado por el Impuesto de Turismo Sostenible (ITS) para atacar las especies invasoras del Parque Natural.
