Según ha informado el Ajuntament, los turismos habían sido estacionados en la calle Santa Rosalía y en las tarjetas se mostraba el mismo número de identificación.
Ambos vehículos estaban aparcados en plazas contiguas reservadas a personas con dificultades de movilidad.
Tras advertir que las tarjetas expedidas por el Ayuntamiento presentaban el mismo número de identificación, los agentes comprobaron la titularidad de los propietarios de los vehículos y constataron que ambos presentaban el mismo domicilio.
Tras localizar a los conductores, los policías comprobaron que una tarjeta era copia de la otra.
Ambos ciudadanos reconocieron haberla falsificado, ser conscientes de su mal uso y llevar tiempo utilizándola para conseguir estacionar más fácilmente, por lo que fueron denunciados por falsedad documental.
