La Fiscalía le imputa por estos hechos un delito continuado de abusos sexuales a menores con prevalimiento de parentesco y un delito continuado de quebrantamiento de condena, por lo que pide una condena de 13 años de prisión.
El hombre ya fue condenado a dos años de prisión en 2015 por un delito de abuso sexual a una menor de 13 años, cuya pena quedó suspendida durante cuatro años. En virtud de esta sentencia, el acusado tenía prohibido aproximarse y comunicarse por cualquier medio con su hija durante cinco años. Sin embargo, durante el verano y las Navidades de 2017 el hombre acudió al domicilio de su hija, según relata el fiscal en su escrito de acusación.
Presuntamente, en dichos encuentros, el acusado besó a su hija, le hizo tocamientos y mantuvo en numerosas ocasiones relaciones sexuales con la menor, a la dejó embarazada.
Por todo ello, la Fiscalía pide 13 años de prisión para el acusado, la prohibición de aproximarse o comunicarse por cualquier medio con su hija durante diez años, privación de la patria potestad durante tres años e inhabilitación del derecho a voto durante la condena. También solicita una indemnización de 10.000 euros para la víctima por los daños morales.
Si resulta condenado en este juicio, el fiscal pide que se revoque la suspensión de la pena de la condena anterior.