La Fiscalía le imputa por estos hechos un delito continuado de abuso sexual a menores con acceso carnal y prevalimiento.
El acusado convivía en Palma con su tío y sus primos, entre los que se encuentra la víctima. En su escrito de acusación, el fiscal sostiene que el hombre aprovechaba que su tío salía del domicilio de madrugada para trabajar para abusar sexualmente de la niña, hechos que presuntamente ocurrieron al menos en cinco ocasiones.
La Fiscalía sostiene que el hombre amenazó a la víctima diciendo que "le pegaría" si contaba lo ocurrido.
Por todo ello, la Fiscalía pide una condena de 12 años de prisión para el acusado, seguida de ocho años de libertad vigilada con obligación de participar en programas de educación sexual y la prohibición de acercarse o comunicarse con la víctima durante diez años. Además, la Fiscalía solicita al acusado una indemnización de 6.000 euros a la víctima.