Según ha informado la Fundación en un comunicado, se trata de un proyecto que prevé asesorar a 650 empresas y realizar 424 visitas a obras de construcción por parte de un técnico especialista en prevención de riesgos laborales, llevando a cabo con carácter localizado la promoción e impulso de las buenas prácticas en materia de prevención.
El objetivo es verificar las condiciones de seguridad existentes en las obras visitadas y asesorar a las empresas y trabajadores sobre los riesgos detectados y las medidas de protección a implementar.
En la presentación del Plan han intervenido el conseller Iago Neguruela; Isabel Castro, directora general de Trabajo, Economía Social y Salud Laboral; Climent Olives Camps, Presidente Fundación Laboral de la Construcción; Sonia Saavedra Ferreira, Vicepresidenta Fundación Laboral de la Construcción; y Miguel Ángel Pardo, Secretario General de CCOO de Construcción y Servicios Camino de Jesús.
Según Negueruela, "se está haciendo un trabajo conjunto muy importante entre Administración y Fundación Laboral de la Construcción que se refuerza aún más con este proyecto". Asimismo, ha recordado que por primera vez en siete años se ha conseguido reducir la siniestralidad laboral y es que durante el primer semestre de 2018 se produjo una reducción del 5,6 por ciento.
Para Climent Olives "aunque los datos sean positivos, no hay que obviar que queda un largo recorrido por hacer". "Baleares sigue siendo la provincia con el mayor índice de siniestralidad, por lo que no debemos relajarnos y seguir trabajando conjuntamente con el Govern, sindicatos, colegios profesionales y otras entidades de nuestro sector, para que esta reducción de cada vez sea más acentuada", ha añadido.
De las 424 visitas previstas en el convenio que entró en vigor en setiembre de 2018, hasta la fecha se han realizado 88 visitas y se han asesorado 91 empresas distintas. Por el momento las visitas solo se han realizado en Mallorca pero durante los meses de marzo y abril se realizarán también en Menorca, Eivissa y Formentera.
Asimismo, Olives ha destacado que "los primeros resultados indican que el rumbo marcado va en buena dirección y es que el sector, en general, es consciente de la necesidad del uso de protecciones". Entre las primeras observaciones de los técnicos encargados de realizar las vistas se observa que hay "una especial preocupación" en los trabajos con riesgo de caída a distinto nivel y en la protección de los mismo mediante el uso de sistema de protección colectiva tipo barandillas.
En el caso de los medios auxiliares más utilizados como lo son los andamios tubulares apoyados, se verifica un creciente uso de sistemas certificados que permiten incrementar los niveles de seguridad en los trabajos que se realizan con ellos. En este tipo de medio auxiliar, se hace necesario sensibilizar más al sector en la formación e información que debe tener el trabajador que monta y supervisa el andamio, así como la documentación que reglamentariamente debe estar presente en la obra.
En esta línea, se constata en las obras visitadas el uso creciente de los equipos de protección individual (EPI) básicos como son el casco, botas y guantes de seguridad, así como la implicación en esta cuestión de los empresarios y trabajadores.
En estas primeras visitas realizadas se confirma que los trabajadores, en una gran mayoría, cuentan con la formación mínima en prevención de riesgos laborales de su oficio requerida según el convenio general del sector de la construcción. Sin embargo, se detecta que en un número importante de trabajadores no tienen complementada la formación preventiva del oficio habitual con otros oficios que puedan desempeñar en la obra y que lo convierte en trabajadores polivalentes.
