Esta apertura se ha podido conseguir después de que el Ayuntamiento de Santanyí llegara a un acuerdo con la Fundació Illes Balears en noviembre de 2018 para alquilarle Es Fortí durante cuatro años. La intención del consistorio de Santanyí es convertir la fortificación en un centro multifuncional para hacer diferentes actos públicos.
Según explicó la alcaldesa pedánea de Cala d'Or, Bárbara Xamena, "esta es la primera pasa del camino porque es Fortí lo puedan disfrutar todos los vecinos del pueblo, así como todos aquellos que nos visitan. Para este equipo de gobierno del Ayuntamiento de Santanyí era fundamental recuperar Es Fortí, y por eso estamos muy satisfechos de que el acuerdo firmado con la Fundación Islas Baleares haya podido cristalizar de una vez por todas en tenerlo abierto " .
Las puertas Fortí abrirán cada día, tanto durante la temporada alta como en la temporada baja. Además, el Ayuntamiento se encargará de hacer el mantenimiento tanto del interior como del exterior, y se volverá a alumbrar las noches hasta la medianoche, lo que hacía más de un año que no se producía .
El precio del alquiler anual por parte del Ayuntamiento es de unos 15 mil euros para unas instalaciones que, cabe recordar, se ubican en Cala Llonga y que el ejército subastó en 1878 por luego ser propiedad de Josep Costa Ferrer. De hecho, fue su familia quien en 1992 lo transfirió a la Fundación Islas Baleares.
Es Fortí fue construido por el ingeniero José Muñoz, y disponía de una guarnición con 4 cañones, cuerpo de guardia por un sargento y 19 hombres, y 3 garitas. Se trata de unas instalaciones que tuvieron que ser reconstruidas en 1793 a causa de los graves desperfectos a consecuencia de una gran ola del mar que entró hacia dentro Santanyí. Es una fortaleza de planta cuadrangular con una anchura de 26 metros, que destaca por las troneras situadas en la zona que da al mar, siendo una de las pocas obras militares de este género en Mallorca. La fábrica es de mampostería, aunque en algunas zonas aparece la sillería de piedra de Santanyí.