Según han informado, dicha prórroga entrará en vigor el 1 de enero y se extenderá hasta el inicio de la prestación del nuevo contrato de concesión y, en todo caso, durante un plazo máximo de un año, prorrogable a otro.
Según ha destacado el Consell, la concesión deberá seguir prestándose en las mismas condiciones, incluyendo el mantenimiento del actual sistema tarifario integrado de Eivissa.
La decisión ha sido adoptada ya que la concesión finaliza el 31 de diciembre y, según la Ley de Ordenación de Transportes Terrestres y el Reglamento Europeo, existe la posibilidad de que la administración pueda adoptar una "medida de emergencia" en caso de riesgo de interrupción de un servicio de transporte público.
La consellera de Movilidad, Pepa Marí, ha declarado que este próximo 31 de diciembre acaban las concesiones y prórrogas con todas las empresas de autobuses, un tema que las administraciones llevan a los plenos de diciembre y "de ahí la urgencia".
Marí ha reiterado que "no es un tema político, sino que, gobierne quien gobierne, debería llevarlo a pleno urgente porque es un tema que afecta al servicio público. Lo importante es que el servicio cumpla con todas las garantías. Es una tranquilidad saber que el 1 de enero el servicio está garantizado y con las mismas condiciones como hasta ahora".
En la sesión, se ha estimado la alegación de las concesionarias contra la modificación de la concesión y asunción de la nueva obligación de acudir a la estación del Cetis.
Según ha explicado el Consell, la posible adopción de este acuerdo sobre el uso de la estación se expondrá en un expediente diferente al actual.
"Para obligar a las empresas a entrar al Cetis, es necesario que todos los requisitos técnicos estén listos. Como este tema está pendiente, se han estimado las alegaciones presentadas por las concesionarias", ha concluido la consellera.