Según ha informado el cuerpo en un comunicado, a los detenidos se les imputa un delito de homicidio en grado de tentativa y otro de amenazas graves.
Los hechos se remontan al jueves 13 de diciembre, alrededor de las 18.00 horas, cuando en un local de lavado de vehículos de Manacor se personó un exempleado junto con su hermano para exigir su readmisión.
A continuación, surgió una disputa entre uno de los agresores, y el exempleado, con la mujer del dueño del establecimiento a causa del despido. Los agresores, que portaban una pistola simulada, usaron un cúter con el intentaron degollar a un empleado, produciéndole lesiones graves.
Al salir los empleados en defensa de la mujer, se produjo una disputa que comenzó con puñetazos y acabó en delito de sangre, ya que uno de los trabajadores sufrió un corte en el cuello de 15 centímetros de largo y 1,5 de profundidad que tenía como fin ocasionarle la muerte.
De hecho, los agresores acudieron al lavadero con un cúter y una pistola con características externas similares a las armas de fuego, ocultas entre sus pertenencias.
Para ello, uno de los hermanos sujetó a la víctima por la espalda mientras el otro hacía uso del cúter, del que se deshizo inmediatamente para emprender la huida.
Con el fin de detener a los autores, la Policía Nacional y la Guardia Civil colaboraron en el establecimiento de un dispositivo de localización que fructificó cuatro días después, con la detención de los dos autores.
Los dos hermanos son conocidos delincuentes de Manacor y entre los dos suman más de 30 detenciones, de las que 21 son por delitos en los que emplearon la violencia contra las personas. Los detenidos pasan mañana miércoles a disposición judicial.