Según ha informado el Ajuntament de Palma en un comunicado, el objetivo es poder ofrecer plazas de aparcamiento seguro de bicicletas en ambos barrios, donde hay una alta densidad de población y donde las viviendas residenciales, normalmente en bloques de viviendas de pisos, no permiten el almacenamiento de bicicletas.
Además, estos barrios se encuentran a gran distancia de la red de aparcamientos públicos de la ciudad integrada dentro del SMAP, que cuenta con un total de 228 plazas para bicicletas repartidas entre los aparcamientos de Via Roma, Antoni Maura, Santa Pagesa, Parc de Sa Riera, Marquès de la Sènia, Manacor, Comte d'Empúries y Comtat del Rosselló.
El contrato se hará por diez años y se ha presupuestado en 650 euros al mes para el local de Pere Garau y 450 euros al mes para el del Rafal Nou.
Esta medida sigue la línea del Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS), aprobado por el Pleno del Ajuntament de Palma en octubre de 2014, que establece una serie de iniciativas para integrar el uso de la bicicleta en la ciudad completando la red actual.
En concreto, se basa en los puntos 19, implantar aparcamientos para bicicletas en los centros de actividad terciaria y equipamientos; 20, reservar espacios para bicicletas en los aparcamientos municipales; y 21, ampliar el sistema de bicicleta pública.