O sea que se convierte en una zona ACIRE. Gran parte de vecinos aplauden la nueva fisonomía. La nueva zona peatonal incluye, entre otras, la plaza del Convent, ante el Ajuntament o la plaza Font y Roig, donde hay los juzgados. La inversión de las obras ha sido de aproximadamente un millón de euros.
Esta peatonización también ha motivado algunos cambios circulatorios, que estos días los operarios van preparando. La intención es que sea efectivo dentro de las próximas semanas.
Se habilitarán unas zonas de carga y descarga, y otras para discapacitados. Desde el Ajuntament informan que, de momento, el control circulatorio en esta zona se hace con presencia policial, pero la intención es instalar cámaras con lectores de matrícula que permitan automatizar el control del tránsito.