Doky, es un perro de la Policía Nacional de 10 años de raza labrador, macho, color negro que con tan solo 4 meses despuntaba como candidato idóneo como perro detector de explosivos.
Su buen carácter mostrado, su entereza, valentía e integridad ante estímulos procedentes del exterior, sin dejarse jamás impresionar por eventualidades del entorno, así como su excelente estado psicofísico, manteniendo un equilibrio de idoneidad imperturbable y constante hicieron que enseguida su guía se empezara a dar cuenta del potencial que tenía su compañero canino.
Día a día no solo su guía sino todos los miembros de la Unidad canina, veían como sus ganas de aprender, su elevado potencial olfativo, su temple y seguridad le facultaban para ejecutar su trabajo con excepcional efectividad y conveniencia. A todo ello se le añadía un carácter alegre y juguetón haciendo con ello que su repuesta al adiestramiento fuera idónea. Y así fue… se fue forjando un perro Policía de esos que dejan huella, cuya compenetración con su guía creó un vínculo perro-guía inquebrantable.
A día de hoy tras muchos miles de requisas preventivas, todas realizadas siempre con su característica intensidad, energía y determinación; tras formar parte en cientos de Dispositivos Extraordinarios (Casa Real, visitas Autoridades Nacionales y Extranjeras, amenazas terroristas…); tras muchísimas incidencias por la posibles artefactos Explosivos a cualquier hora del día y de la noche, colaborando con los TEDAX y con la Brigada de Información y transmitiéndoles ese plus de seguridad que transmite un perro bien adiestrado; tras casi diez años de Servicio Operativo, su carrera policial está llegando a su fin.
Los motivos por los que se le ha concedido la mención honorífica al perro- policía “Doky” no se basan solo en los servicios prestados a la Policía Nacional, los cuales de por si deberían ser suficientes, sino también en su gran labor social realizada. Hablamos de un perro que por su carácter alegre y juguetón junto con una extraordinaria obediencia avanzada ha levantado pasiones en miles de niños y ha conmovido el corazón de cientos de ancianos. Participando de forma desinteresada y transmitiendo alegría a quien más lo necesitaba ha colaborado de forma directa con la Delegación de Participación ciudadana de esta Jefatura Superior realizando exhibiciones y visitando hospitales infantiles y residencias de ancianos.