El hombre, que cuenta con antecedentes por lesiones y daños, acudió al bar y se encaró con una mujer, que estaba ahí tomando algo, vecina suya. Le dijo que era una "hija de puta", una "chula de mierda", que él había estado en la cárcel y que le iba a "cortar la cabeza".
Tras esto, se abalanzó hacia a ella, cosa que fue impedida por varias personas que se encontraban en el bar. Así, se encaró con los regentes del bar, también vecinos suyos.
A uno, le llamó "chivato" y le dijo que se iba a enterar. Al ver esto, la otra regente, se interpuso entre los dos y el condenado le dijo "tú ven para aquí, ven, a ti te voy a follar", mientras hacía gestos obscenos y se acercaba a ella. Así las cosas, el regente se interpuso y A.S.C. le propinó un empujón que le tiró al suelo y le causó una fisura.
Horas más tarde, sobre las 21.00 horas, el hombre volvió al establecimiento. Empezó a mostrar su pene, mientras se hacía tocamientos y hacía comentarios obscenos dirigidos a la dueña del bar. Además, volvió a amenazar al regente y le dijo: "Tú sal fuera, que te voy a matar, te tengo que matar, ya estuve en la cárcel por asesinato y a ti te voy a matar".
Tras el aviso pertinente, la Policía Nacional acudió al lugar y detuvo al hombre. Este les dijo: "Metedme preso, me da igual, cuando salga voy a cortarle el cuello a la puta chivata". Ya en las dependencias policiales, el hombre les dijo a los funcionarios presentes que iba a matar al dueño del bar aunque se tuviera que "ir a Guantánamo".
Por estos hechos, A.S.C. ha sido condenado por tres delitos de amenazas y uno de lesiones a un año y medio de cárcel y a pagar una indemnización por los daños de 3.000 euros.