Frecuentemente considerado el epítome de los ballets clásicos, 'El lago de los cisnes' es un cuento de amor, traición y triunfo del bien sobre el mal. La representación de los personajes en esta historia, particularmente en el confronto entre la pureza del Cisne Blanco y, la intriga, por la duplicidad del Cisne Negro, requiere virtuosismo y talento dramático. Otro momento de clímax es la encantadora “Danza de los Pequeños Cisnes”.
El prestigio y la notoriedad intemporal alcanzada por 'El lago de los cisnes' están motivados por la música inspiradora de Pyotr Tchaikovsky, pero también, por la coreografía inventiva y expresiva de Marius Petipa que, relacionando el cuerpo humano con los movimientos de un cisne, revela la genialidad de su potencial coreográfico y de su creatividad artística.
Esta producción clásica presenta una escenografía suntuosa, figurines deslumbrantes y un cuerpo de baile notable, liderado por estrellas de la danza internacional.