Según ha informado la asociación en un comunicado, los objetivos marcados para reposicionar el destino Magaluf tras unos años de pérdida de calidad y reputación fueron los de "potenciar la atracción de turismo familiar y adulto, potenciar la diversificación, modernizar y elevar la calidad de la oferta hotelera y complementaria y mejorar la seguridad, convivencia y reputación del destino".
Como consecuencia de todo ello, los promotores, empresas y Administraciones Públicas, esperaban también ir alargando progresivamente la temporada turística, hasta llegar a una media de nueve meses de funcionamiento.
En cuanto a los resultados de la temporada, el presidente de los hoteleros se ha mostrado prudente, puesto que, si bien el cómputo total de la ocupación anual ha sido un 3% superior al 2017, en algunos meses ha sido netamente inferior.
Por lo que respecta a la evolución de los precios en esta temporada, ha explicado que, a pesar de que los hoteles han seguido invirtiendo en mejorar la calidad y la categoría de los establecimientos, "las tarifas medias de los hoteles reformados se estancaron respecto al año anterior, lo que ha dificultado el mantenimiento de la rentabilidad".
En relación al objetivo de extender la apertura de los establecimientos, los hoteleros se han mostrado "satisfechos" puesto que en 2018 "se lograron mantener algunos hoteles más abiertos y las previsiones para el invierno 2018-2019 son de mayor número de plazas abiertas entre noviembre y marzo".