El hombre, que se enfrenta a 12 años de cárcel por un delito de abuso sexual continuado con acceso carnal, ha dicho que la niña suele mentir, principalmente, por que siente envidia de sus dos hermanos. La hermana y la madre de la víctima se han manifestado en términos similares.
Así, han coincidido en decir en que la niña es "muy mentirosa" y que siente celos de sus hermanos y que nunca ha aceptado al acusado como figura paternal a pesar de que este, tal como ha dicho la madre, "nunca haya querido sustituir al padre".
Además, la madre ha dicho que no se cree las acusaciones de la niña respecto a su ex y que todavía le gustaría saber qué ocurrió. "Lo único que sé es que, rotundamente, él no ha sido", ha dicho en relación a su expareja.
Según el escrito de acusación, el hombre cometía los abusos, aprovechando los momentos en que su expareja sentimental o la hermana mayor de la víctima no se encontraban en casa.
La Fiscalía considera que cuando la menor tenía nueve años y hasta que tuvo 12 años, el hombre le tocó el pecho y las partes íntimas en numerosas ocasiones. Además, hasta en tres ocasiones obligó a la menor ha practicarle una felación y le introdujo el pene tanto por la vagina como por el ano.
Por ello, el Ministerio Fiscal también pide la prohibición de aproximarse a la hija a menos de 500 metros y de comunicarse con ella por cualquier medio durante 14 años. Igualmente, solicita una medida de libertad vigilada por un periodo de diez años y el pago de una indemnización de 8.000 euros a la víctima.
