La aerolínea irlandesa asegura que la compañía ha decidido ser "pragmática y racional" y aceptar las peticiones tanto de pilotos como de los tripulantes de cabina (TCP), aunque en el primero de los colectivos el acuerdo parece más cercano.
Una opinión que difiere con la de los sindicatos que el pasado viernes denunciaron un bloqueo de las negociaciones por parte de la empresa. El Sepla ha llevado el tema a la Audiencia Nacional mientras que los sindicatos USO y Sitpla de TCP han amenazado con nuevas huelgas si no se admiten sus demandas.
Ryanair, la mayor compañía de bajo coste en Europa y la que más viajeros transporta en España, asegura que quiere alcanzar un acuerdo "lo antes posible" y confía en que la transición sea "una cuestión de meses", por lo que se pueda producir en los primeros meses de 2019.
No obstante, la aerolínea asegura que este cambio en los contratos no será fácil puesto hay que realizar cambios en la legislación irlandesa. "La transición no es simple y llevará tiempo", ha asegurado el director de marketing de la compañía, Jenny Jacobs, en una rueda de prensa este martes en Madrid.
En el caso de los pilotos, señala que la oferta que les han realizado cubre sus principales peticiones: contratos locales y someterse a la jurisdicción local a principios de 2019, mejores salariales para los pilotos, promoción de capitán en tres años, mejores rotaciones, listados de antigüedad nacional, transfers, vacaciones y promociones justas, así como formación de primer nivel.
A los TCP, Ryanair afirma haber ofrecido contratos locales y jurisdicción local a principios de 2019, salarios competitivos, promociones después del primer año, mejores rotaciones, más contratos directos y menos por agencia, concesión de 400 euros por año para que cubran uniformes o gastos médicos así como formación de primer nivel gratuita.
La compañía reconoce que las huelgas han afectado a la credibilidad de la compañía, no así a la operativa porque el 90% de los vuelos operaron con normalidad durante las huelgas. Así espera recuperar la confianza de los pasajeros y no dañar el negocio.
"La compañía ha decidido aceptar las demandas sindicales sin dejar de ser rentables", admitió el directivo quien añadió que a pesar de que han aumentado los costes de combustible y personal la compañía continúa bajando tarifas porque defienden su modelo de negocio.
La compañía, que insiste en su apuesta por España, anunció este martes un total de 36 nuevas rutas desde nuestro país para el próximo verano, con lo que se superan las 600 rutas en total. Con ello confían en alcanzar los 48,3 millones de pasajeros en el año, un 3% más.
De las 36 nuevas conexiones, once tienen como destino Reino Unido, seis Italia, cinco Marruecos, cuatro Francia, dos en España (Sevilla-Alicante, Sevilla-Fuerteventura), y una ruta nueva a Irlanda, Hungría, Ucrania, Luxemburgo, Portugal y Polonia.
Unas previsiones positivas a pesar reconocer cierto "enfriamiento en el turismo español" por lo que pide a las autoridades la potenciación de nuevos destinos, una mayor competitividad en precios manteniendo los precios turísticos bajos, así como una mayor diversificación tanto de temporada como de clientes. "Las tasas e impuestos bajos atraen a las aerolíneas, y las rutas y billetes baratos captan viajeros", ha defendido,
El tráfico total de la aerolínea creció un 11% en septiembre hasta llegar a los 13,7 millones de pasajeros con un índice de ocupación del 97%. Y todo ello a pesar de que tuvo que cancelar unos 400 vuelos en ese mes debido a las huelgas de pilotos y tripulación de cabina. "No queremos más huelgas, queremos seguir volando y tener clientes satisfechos", concluyó Jacobs.
De su lado, los sindicatos europeos convocantes de la huelga de tripulantes de cabina (TCP) en seis países europeos han asegurado hoy que "cualquier intento por separarlos" por parte de Ryanair a través de acuerdos con "sindicatos amistosos", fracasará porque están unidos en la causa para conseguir que la aerolínea acepte las legislaciones nacionales y a los representantes elegidos por los trabajadores.
El escrito, dirigido a la dirección de Ryanair, ha sido firmado por los sindicatos Sitpla y USO de España; FILT-CIGL y Ultritrasporti de Italia; CNE/LBC de Bélgica; Verdi de Alemania; FNV de Holanda y Snpvac de Portugal, y en él han asegurado que a través de las dos huelgas conjuntas convocadas en julio y septiembre "han demostrado" en los principales aeropuertos que "Ryanair debe cambiar".