Cabe destacar que el crecimiento es atribuible, principalmente, al aumento de la actividad del hospital de la Cruz Roja en Palma, centro sanitario sin ánimo de lucro integrado en el sistema sanitario público de les Illes Balears, que sufrió un crecimiento del 35% y llegó a atender a 36.336 pacientes. Esta cifra, en relación a la actividad global de la Institución, supone un 37%, siendo la acción social el área responsable de la mayor parte de la actividad, representando el 63% del total de personas atendidas.
Crecen también el número de alumnos en los centros formativos de la organización, alcanzando los 4.938 alumnos, un 17 % más respecto el curso anterior. Sube también la actividad del área de medioambiente, participando en sus programas de educación, sensibilización y de capacitación medioambiental con colectivos vulnerables más de 4.339 personas, lo que supone un crecimiento del 35 %.
Por otra parte, y en sentido opuesto, se produce un ligero descenso de la actividad en el área de intervención social (-1.58%), responsable de la atención de personas vulnerables, personas con discapacidad, personas mayores, población reclusa, mujeres en dificultad social, entre otros colectivos. Sin embargo, se aprecia un leve crecimiento del número de beneficiarios de los programas de ayuda a personas en situación de extrema vulnerabilidad, atendiendo esta área a 11.830 personas, cifra que supone un leve incremento del 2.7%.
De las ayudas entregadas (13.862), un 44% fueron prestaciones económicas, un 17% vestuario y abrigo, un 12% productos de higiene personal, un 8,5% pago de medicamentos, un 5.7% pago de suministros y el 17% restante fueron material escolar y juguetes. Se beneficiaron de este programa 11.830 personas, un 2,7% más respecto el año anterior.
Según apuntó el presidente de Cruz Roja, Toni Barceló, “los datos presentados señalan una mejora paulatina de la vulnerabilidad, no obstante, existe un segmento de la población que sufre situaciones de vulnerabilidad severa y que presentan serias dificultades para hacer frente a situaciones adversas”.
Atendiendo a los datos globales, las personas atendidas en Cruz Roja son mayoritariamente mujeres, éstas representan un 60% del total. En el área de personas mayores incluso el porcentaje llega a alcanzar el 74%. Solo se invierte este perfil en los programas que atienden a las personas privadas de libertad y al colectivo de personas refugiadas, siendo los hombres el colectivo prioritario en ambos.
En relación al rango de edad el perfil mayoritario se ubica entre los 31 y los 51 años. Aun así, en los programas de atención a la gente mayor, el promedio de edad se sitúa en los 85 años.
Según indicó la coordinadora, Juana Lozano, “atendemos a personas cuya situación de vulnerabilidad se ha cronificado, y en muchos casos, a pesar de contar con un trabajo, normalmente temporal o precario, les obliga a continuar solicitando ayudas para poder hacer frente a gastos extraordinarios”.
Un total de 99.149 personas en Baleares han sido atendidas a lo largo del 2017, una cifra que refleja el esfuerzo de la organización para contribuir a dar respuesta a las carencias de las personas que, por diferentes motivos, se encuentran en situación de dificultad.
