Así lo ha anunciado la asociación este domingo en un comunicado, en el que además ha asegurado que este decreto "ataca" a la náutica recreativa "y crea inseguridad jurídica para cualquier navegante".
Asimismo, la Aenib y empresas del sector náutico han expresado su rechazo hacia el conseller por haber "ignorado las alegaciones de la Asociación y el dictamen del Consejo Consultivo de la comunidad".
A su vez, el presidente de la Aenib, Jaume Vaquer, ha lamentado "las prisas y las formas" con las que se ha aprobado esta normativa. "Parece que el conseller solo busca dar un golpe de efecto haciendo que todo coincida con la llegada del buque de Greenpeace a estas aguas", ha señalado.
Por otro lado, ha criticado "duramente" que el Govern retirase del borrador original la obligatoriedad de arreglar 18 emisarios irregulares de los 46 que dependen de la administración pública y la prohibición de realizar vertidos encima de praderas de posidonia.
Desde el primer momento, la Aenib ha mantenido su voto en contra de la aprobación de decreto de posidonia y ha asegurado que es una normativa "mal enfocada" ya que "la intención del conseller era crear una gran cortina de humo para no tener que invertir en otras cuestiones, como por ejemplo mejorar las depuradoras", ha concluido.
El mercado de la náutica de recreo en Baleares ha facturado 561 millones de euros, por lo que ha experimentado un crecimiento del 10,5 por ciento en cuatro años.
Tal como ha señalado la Aenib, 272 empresas ofrecen este servicio en todo el archipiélago. Según ha recogido un estudio presentado por las empresas del sector en el proyecto Desarrollo estratégico, este mercado ha creado más de dos mil puestos de trabajos.