Según el comunicado, el Colegio ha aclarado que España posee una ordenación urbanística en muchos lugares de su geografía que no tienen en cuenta el peligro real que suponen los incendios forestales. En concreto, han señalado Balears como uno de los puntos más frecuentes a estos incidentes.
Algunas de las planificaciones que ha mencionado son: prevención, emergencias y autoprotección de las "zonas especialmente sensibles". Estos instrumentos de gestión mejorarían las acciones de prevención que, tal como ha subrayado, en él se planifica las actuaciones para intentar reducir el número de incendios y sus consecuencias posteriores.
Desde el Colegio de Ingenieros han hecho un llamamiento a las administraciones locales para que lleven a cabo un plan de prevención de incendios forestales, aunque en algunas Comunidades Autónomas es "obligatorio" si los municipios presentan terrenos forestales o zonas identificadas de alto riesgo.
También han señalado que las "zonas de interfaz", como las urbanizaciones, no cuenta, en la actualidad, con instrumentos preventivos.
Los incendios que afectan a las zonas de interfaz resultan de complejidad "extrema" debido a la afluencia masiva de visitantes en según que épocas y a la presencia masiva de zonas residenciales con terrenos agroforestales.