Además, la apuesta de la isla como Reserva de la Biosfera, “la ha alejado de una oferta de concentración y las ETH se han constituido como oferta tradicional de la isla, de baja intensidad y adaptada al paisaje”.
Estas son las principales conclusiones del estudio 'El impacto de la comercialización de estancias turísticas en viviendas (ETH) sobre las Islas Baleares', realizado por inAtlas por encargo de la FEVITUR i que sitúa Menorca como la isla balear de mayor concentración de viviendas no principales –vacías y secundarias- (29,80%). El estudio revela, además, que la oferta de Maó está concentrada casi en su totalidad en viviendas unifamiliares. Menorca es también la isla con una mayor estacionalidad turística, con un 86% de la demanda concentrada en los cuatro meses de verano.
Por todo ello, según se desprende del estudio, el aumento de los precios de alquiler residencial se debe a factores socioeconómicos, como “el fuerte aumento del empleo y de la economía local, unido a un importante parque de viviendas principales en alquiler, que representan el 28,73% de los hogares”.
El alquiler de viviendas por días o por semanas, detalla el trabajo de inAtlas, es un actor más en el ecosistema de los alojamientos turísticos y constituye una actividad muy arraigada en los principales destinos turísticos del mundo. En este sentido, el presidente de FEVITUR, Tolo Gomila, ha añadido que estos datos "aportan luz y sobre todos datos al debate sobre el precio de la vivienda y se demuestra que en ningún caso se puede culpabilizar a las estancias turísticas vacacionales de la recuperación de precios que vive el mercado inmobiliario".