El juicio ha quedado aplazado debido a la incomparecencia de uno de los acusados, que está en paradero desconocido, y de la víctima, que ha informado al Tribunal de que no podía asistir.
En la causa está acusado otro hombre que sí se ha presentado a la vista oral este mediodía en Palma. En cambio, la Audiencia ha intentado localizar, sin éxito, al otro acusado, al que no se ha podido entregar la citación judicial en ninguno de los dos domicilios en Reino Unido de los que tiene constancia el Tribunal. La Audiencia también ha intentado localizarle a través de su madre.
Por ello, la Fiscalía ha solicitado una orden de búsqueda y captura, a la que el Tribunal ha accedido.
Por otro lado, la víctima ha informado al Tribunal, a través del consulado británico, de que no puede asistir por motivo de su trabajo. Cuando se vuelva a señalar el juicio, la víctima declarará por videoconferencia desde Reino Unido.
Igualmente, la defensa del acusado que sí se ha presentado al juicio ha solicitado que cuando se vuelva a fijar la vista su representado también pueda declarar por videoconferencia, ya que reside en Granada.
La Fiscalía se ha opuesto a esta petición porque al ser un acusado, y no un testigo, debe estar presente en todo el juicio. Por este motivo, la Sala ha rechazado esta solicitud de la defensa.
La agresión sexual tuvo lugar en septiembre de 2014 en el Puerto de Alcúdia (Mallorca). Según el escrito del Ministerio Fiscal, al salir a las 03.00 horas de la madrugada de una discoteca, los acusados se ofrecieron a acompañar a la víctima a una parada de taxis para que pudiera regresar al hotel donde se encontraba alejada pero, en realidad, la condujeron hasta la playa de la zona trasera de otro hotel de la misma localidad.
Ahí, tras convencerla de que podría llegar antes a su hotel a nado, se metieron en el mar y una vez dentro, la agarraron, desnudaron y penetraron vaginalmente sin preservativo.
La Fiscalía pide para cada uno de los procesados 12 años y seis meses de prisión por un delito de agresión sexual, así como la prohibición de comunicarse con la víctima y de acercarse a ella a una distancia de 500 metros durante 13 años. Además, les pide una indemnización de 6.000 euros.