Recordar que los cuatro protagonistas ahora de nuevo investigados judicialmente ya han protagonizado otros capítulos en esta larga crónica de enfrentamientos entre los hermanos Planisi, de la reconocida familia de industriales palmesanos.
Según denuncias presentadas y aceptadas anteriormente, se habría realizado la venta de las naves industriales del Polígono de Son Castelló de la familia Planisi al suegro de uno de los hermanos, Gabriel Planisi, a cambio de un precio irreal que verdaderamente ocultó el pago de deudas personales del propio Gabriel. Alfredo Planisi, al que se ocultó todo este entramado, encabeza la reclamación judicial para que se le restituya la parte económica del valor real de las naves industriales.
Esta decisión del juez se fundamenta en la sentencia del Tribunal Supremo de 16 de junio sobre este mismo caso en la que el ponente, el juez Carlos Granados, constata que determinadas actas de juntas extraordinarias aportadas por los ahora nuevamente investigados son sospechosas de ser falsas. Actas de juntas extraordinarias que habrían servido de pruebas de la defensa y que, si se confirma la nueva denuncia, serían un caso constitutivo de falsedad documental.
El juez Garcías Sansaloni ha citado ya a declarar para esclarecer la naturaleza de las actas a Francisca Planisi, el representante de la Corporación Piñero, Isabel García y a María Encarnación Piñero, esposa y, por tanto, hija del fallecido suegro de Gabriel Planisi.