Según ha recogido en un comunicado este miércoles la Conselleria, Pons también ha asegurado que este verano habrá un incremento de las conexiones marítimas y un aumento del 35 por ciento de la capacidad de carga de mercancías en los barcos que cubren las conexiones entre Barcelona y Palma y de un 10 por ciento en las conexiones con Valencia.
Dicho incremento de capacidad de carga, ha sostenido, supone una garantía de los suministros en las Islas durante la temporada alta. Igualmente, las conexiones serán más rápidas y tendrán más frecuencias.
Por otra parte, y con el fin de evitar fraude en los descuentos de residente, el conseller ha detallado que se iniciará una campaña de control, de modo que las compañías navieras deberán exigir el DNI a los pasajeros en el momento de embarque. En caso de que no haya concordancia, tendrán que emitir un informe a la Marina Mercante.
Asimismo, Pons ha recordado que el coste del descuento de las bonificaciones en transporte marítimo es ahora de unos 20 millones de euros (nueve a cargo del Govern, que abona el 25 por ciento y 11,5 millones que asume el Estado por el 50 por ciento).
Finalmente, ha reiterado que hay acuerdo entre todos los miembros de Mesa en la necesidad que el Estado se comprometa al pagar el 75 por ciento de descuento de residente en los desplazamientos con la península, tanto en marítimo como en aéreo y ha insistido en la necesidad de que se aprueben las enmiendas en los Presupuestos Generales del Estado de 2018 para que sea posible.
