Estarás ha mostrado la máxima repulsa ante los hechos ocurridos en Pamplona en 2016, ya que suponen “el atropello al derecho más elemental de una persona, la libertad sexual y la dignidad, por parte de miserables que merecen el más absoluto desprecio”.
“Tenemos derecho a vivir sin miedo, sin culpas, sin violencia, sin cargas, sin angustias y sin incertidumbre. Estamos aquí para reivindicar un derecho que nos pertenece. Es una amenaza a la democracia y un obstáculo a la paz. Al volver a casa, quiero ser libre, no valiente”, ha defendido la eurodiputada durante un debate en el Parlamento Europeo sobre la sentencia dictada recientemente respecto a este caso.
Asimismo, ha recordado que “los tribunales de justicia se han limitado a aplicar una regulación arcaica y estereotipada que corresponde al año 1995 y fomenta el absurdo de que tiene que ser la propia mujer la responsable de protegerse de la violación”. Y eso, ha asegurado, “es lo que tiene que cambiar”.
Y tiene que hacerlo desde el diálogo y la unidad, ha añadido Estarás: “criticar a los jueces no es el camino, es no entender nada del valioso regalo que supone vivir en un Estado de derecho. El sistema judicial merece el respeto de los ciudadanos”.
La eurodiputada balear ha puesto de manifiesto que “solo 9 países europeos reconocen que sexo sin consentimiento es violación. El resto, entre ellos España, definen la violación en función de la violencia”.
Por último, ha pedido apostar por la formación, el sentido común, el diálogo, la unidad y una reflexión conjunta de quienes “trabajamos día a día para que ser mujer no suponga un factor de riesgo”.