El nuevo plan prevé de este modo adaptar al aumento de demanda el número de vehículos que ofrecen el servicio de taxi entre el 1 de junio y hasta el 30 de septiembre.
La concejal de Promoción Económica, Maria Membrive, ha explicado que el objetivo de esta iniciativa es reducir el número de incidencias y mejorar la calidad del servicio. "El nuevo plan solucionará una problemática que hace muchos años que se está arrastrando, que es la falta de taxis que sufrimos en el municipio", ha señalado.
En este punto ha reconocido que durante el verano pasado "hubo muchos problemas y se dieron situaciones complicadas". "Hemos de resolver los problemas de los residentes, que el año pasado no se podían mover ni dentro de la ciudad, y también hemos de poder atender a las personas que nos visitan", ha añadido Membrive.
La concejal ha indicado que desde final de la pasada temporada se ha estado trabajando de forma consensuada con el sector del taxi. "Consideramos, como equipo de gobierno, que debíamos de ser prudentes y por eso decidimos dar 27 licencias temporales y ver cómo funciona esta temporada", ha dicho.
El plan aprobado por el Ajuntament prevé la concesión de un máximo de 27 licencias temporales, que serán intransferibles y posibilitarán la prestación del servicio desde el 1 de junio hasta el 30 de septiembre con una vigencia de cuatro años consecutivos.
Las autorizaciones concedidas se habilitarán para la prestación del servicio con origen dentro del municipio de Maó y dentro de unos horarios que se consensuarán con el sector.
El año próximo y después de valorar la efectividad de las autorizaciones concedidas, el Ajuntament podrá otorgar nuevas licencias si se considera necesario.