Así lo han manifestado en un acto conjunto la Confederación de Asociaciones Empresariales de Baleares (CAEB), la Federación de Empresarios del Sector del Comercio (Afedeco), la Federación de la Pequeña y Mediana Empresa de Mallorca (Pimem) y la Asociación del Pequeño y Mediano Comercio de Mallorca (Pimeco).
El presidente de Pimeco, Antoni Fuster, ha asegurado que están "muy preocupados" por la posibilidad de que se cree "un vacío legal" con el cambio de ordenanza y que genere un "efecto llamada" de otros manteros, sobre todo el temporada alta.
Por ello, Fuster ha sostenido que las cuatro patronales piden la dimisión de Jhardi al haber demostrado "muy poca sensibilidad hacia el sector del comercio y no haber pensado en ningún momento en el pequeño comercio ni en el modelo de ciudad" que proponen.
Por su parte, el presidente de Afedeco y vicepresidente de CAEB, Rafael Ballester, ha criticado que la regidora afirmara que la venta ambulante no es un problema prioritario para los comerciantes y ha mantenido que "si la ocupación de vía pública no está permitida por los comercios legalmente constituidos mucho menos debe estarlo por la venta ambulante ilegal".
Igualmente, Ballester ha indicado que la venta ambulante es "un problema social". "Reclamamos que la lucha no sea contra los vendedores que están en la calle. Pensamos que las actuaciones tienen que ser más contundentes contra la distribución y evitar que las mafias puedan seguir explotando a esta gente", ha dicho.
En esta línea, el presidente de Pimem, Jordi Mora, ha asegurado es necesario erradicar la venta ambulante "acompañado de un plan social y unas políticas sociales" y ha pedido que "se les haga una formación y un plan de inserción" para ayudarles en reinsertarse en el mundo laboral.