Los cristianos realmente creen que Cristo fue el Cordero de Pascua del que se habla en Éxodo, porque Él mismo se convirtió en el sacrificio perfecto, que no cometió pecado alguno pero pagó por el pecado de todo el mundo. Los judíos que decidieron seguir a Cristo, decidieron honrarlo ese día y el de los años sucesivos durante el tiempo de la Pascua judía.
Pero mientras el cristianismo se extendía por las naciones no cristianas, la celebración de la Semana Santa fue combinada gradualmente con "los ritos de primavera" de las culturas no cristianas aborígenes, que más tarde fueron casi exterminadas y asimiladas por la misma iglesia por sus actos “paganos”.
Las celebraciones modernas son el resultado de la derivación, tanto de los “rito de primavera” aborígenes, junto al sacrificio de cristo en la pascua judía. Al mismo tiempo,se procede el Domingo de Resurrección o Domingo de Pascua.
Para la religión judía, la Pascua (“Pésaj” en hebreo) es una festividad solemne que celebra la libertad del pueblo hebreo de la esclavitud de Egipto
El Éxodo es el segundo libro de la Biblia. Se trata de un texto tradicional que narra la esclavitud de los Hebreos en el antiguo Egipto y su liberación a través de Moisés, quien los condujo hacia la Tierra prometida
