Esta decisión se enmarca en la estrategia integral del banco, recogida en el Plan Estratégico 2018-2020, de apostar, entre otras palancas, por un proceso de digitalización responsable a medida del cliente.
El Plan Estratégico prevé que Bankia realizará en los próximos tres años una inversión cercana a los 1.000 millones de euros con el fin de avanzar en la digitalización de la compañía y que la tecnología sea útil para los clientes y, por tanto, para la sociedad.
Para el presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, "la protección de los datos personales y la privacidad de nuestros clientes es una prioridad para el banco y, para ello, hemos diseñado un entorno digital seguro y privado, gracias a la formación, la concienciación y la capacitación de empleados, proveedores y otros grupos de interés de la entidad".
"Hoy, y ante el futuro cada vez más digital, es más importante si cabe prestar una especial custodia de los datos personales de los clientes. Por ello, desde Bankia debemos ofrecer una respuesta óptima a esta demanda", ha indicado Goirigolzarri.
El presidente de la entidad ha recordado que el 64% de los consumidores considera a la banca como garantía de seguridad en temas de privacidad y protección de datos, únicamente superada por los hospitales. Además, un 87% reconoce que sus datos personales tienen un valor, mientras que el 73% quiere proteger mejor sus datos, pero no sabe cómo hacerlo.
Por ello, el banco trabaja en la aplicación de los estándares que ofrezcan la máxima calidad en relación con la gestión de los derechos de los clientes sobre sus datos y la privacidad de los mismos. En concreto, se va a desarrollar un catálogo de datos personales e identificar los datos para el ejercicio de derecho de portabilidad, entre otras iniciativas.
Asegurar la protección de la información personal
La nueva directora de Protección de Datos y Privacidad, Elena Bernal, es licenciada en Derecho y ADE, y además cuenta con formación en materia de protección de datos.
Con este nombramiento, Bankia cumple los requerimientos establecidos en la nueva regulación europea GDPR, con el objetivo de reforzar la transparencia y el control de la información de los clientes. Además, Bankia ha añadido también el término Privacidad, lo cual muestra su disposición estratégica para dar soluciones en este ámbito.
Entre las nuevas funciones de Elena Bernal están las de la supervisión del cumplimiento de la protección de la información personal proporcionada por los clientes, así como la implementación y la aplicación de la política de Bankia en esta materia.
En este sentido, la entidad desarrolla nuevos procedimientos internos con el objetivo de detectar los posibles impactos que puedan producirse contra la privacidad, lo que sitúa a Bankia a la vanguardia de las mejores prácticas internacionales en el terreno de la protección de datos.
En coordinación con el Área de Ciberseguridad, Bankia desarrolla unos modelos de control para dar respuesta a la cada vez mayor preocupación de los clientes por la utilización de sus datos personales.
De esta manera, los expertos en ciberseguridad del banco realizan los denominados Data Privacy Impact Assessment (DPIA’s), análisis que permiten identificar y corregir posibles ataques contra la seguridad de los datos personales de los clientes.