La petición queda reflejada en una moción que llegará al pleno convocado para el próximo día 8 de marzo y se concreta en la propuesta de declarar el interés autonómico del proyecto para dotar a Alaior (y toda su área de influencia: término municipal, Fornells, Es Mercadal y Es Migjorn) de un nuevo centro de atención primaria capaz y suficiente para albergar la demanda de consultas y servicios sanitarios.
La propuesta del equipo de gobierno se sustenta en la posibilidad que ha abierto el Decreto 1/2018, de medidas urgentes para la mejora y/o la ampliación de la red de equipamientos públicos de usos educativos, sanitarios o sociales de la Comunidad Autónoma de las Illes Balears.
La nueva normativa en vigor prevé los mecanismos para dar prioridad y urgencia para la ejecución de proyectos necesarios, de interés general. La cesión de la parcela y su calificación, la aprobación del proyecto y su ejecución, son algunos de los trámites para los que se abre esta vía ágil que responde al propósito de evitar que los dilatados procesos urbanísticos compliquen y alarguen los plazos de ejecución de infraestructuras sanitarias, culturales o sociales estratégicas.
La aplicación del decreto permite la calificación directa de terrenos para cumplir con esos fines sociales, culturales o sanitarios, siempre que estén justificados y se haya producido la declaración de interés autonómico. En este supuesto se hallaría el proyecto de construcción de un centro de Salud en Alaior, cuya necesidad empezó ya a plantearse en el año 2007.
El equipo de gobierno ha valorado las posibilidades que se abren a partir de la aprobación del decreto y que se ajustan exactamente a las circunstancias de un proyecto largamente reclamado, ya definido, que cuenta con planos técnicos, dispone de parcela, que llegó incluso a tener licencia de obras y para el que hay también crédito presupuestario dentro de las partidas de IB-Salut.
El único obstáculo actual para que el Centro pudiera llevarse a término se concreta en la anulación del PGOU de 2009 y consecuentemente en la necesidad de hacer modificaciones puntuales del plan vigente (1994) o del que se halla en trámite de redacción, para la calificación del terreno. Tanto una vía como la otra exigen un tiempo que podría comprometer la inversión por parte del Govern balear y postergar aún más una iniciativa demorada desde hace una década.
En las actuales circunstancias, los mecanismos que ha aprobado el Govern balear constituyen exactamente la solución que puede permitir reactivar una vieja aspiración que en realidad, debido al retraso acumulado, se ha convertido ya en una necesidad imperiosa.
El carácter supramunicipal del Centro de Salud y la demora acumulada recomiendan poner en juego los mecanismos que ha arbitrado el Govern balear y que pueden desencallar este proyecto definitivamente.
Conviene recordar que el pasado verano, los máximos responsables de los servicios sanitarios en Baleares y Menorca, el gerente de IB-Salut, Juli Fuster, y el gerente del Área de Salud de Menorca, Antoni Gómez Arbona, solicitaron a la alcaldesa Misericordia Sugrañes la activación del procedimiento para ejecutar cuanto antes el proyecto. La alcaldesa se comprometió entonces a hacer la modificación necesaria del PGOU, precisamente en apoyo de lo que es ya una necesidad ineludible por más tiempo.
Esa misma inquietud viene respaldada por los profesionales que prestan servicio en el Centro de Es Banyer y con seguridad por muchos usuarios que en la última década han visto cómo las instalaciones han tenido que repararse, la sala de espera resulta insuficiente o incluso, a falta de espacio, algunos servicios de nueva creación se han tenido que instalar en Es Mercadal iniciando así una dispersión de las prestaciones que debe dar un centro de asistencia primaria.
El actual Centro de Salud da servicio a la población del núcleo urbano de Alaior, Cala en Porter, Mercadal y Fornells que sumen un total de 12.132 tarjetas sanitarias lo que aumenta en veranos hasta las 13.500 tarjetas, de acuerdo con los datos recientemente publicados por IB-Salut. Las expectativas apuntan a un incremento de la demanda en los próximos años.
El gobierno municipal ha estudiado el decreto y considera que conviene aprovechar la oportunidad que éste brinda ya que suprime los impedimentos que hasta ahora había y convierten así esta solución en la más efectiva, económica e inmediata de cuantas pueden plantearse en este momento.
Hay parcela, hay proyecto, el IB-Salut asegura que tiene partida, hay confluencia política en la necesidad de dar solución a esta infraestructura y en consecuencia, la responsabilidad ante los residentes de Alaior y de todos los usuarios de un servicio supramunicipal no puede ser otra sino activar esos mecanismos que el propio Govern balear ha previsto para casos como éste confiando en un rápido inicio de obras.
