Así lo ha explicado el presidente de la Federación, Gabriel Moragues, en declaraciones a Europa Press tras una asamblea que ha durado unas dos horas en Palma, a la que han asistido también taxistas no afiliados.
Según Moragues, durante la asamblea ha habido apoyo mayoritario a esta propuesta de un proyecto de viabilidad. Los taxistas podrán dejar su opinión por escrito en la sede de la Federación entre los días 17 y 19 de enero, para conocer cuántos profesionales están dispuestos a participar en el proyecto.
El objetivo es plantear la posibilidad de explotar estas 700 licencias VTC como complemento al taxi, para llegar "donde el taxi no cubre", según Moragues.
Como ejemplo, el presidente ha denunciado que en Ibiza se están prestando estos servicios con autorizaciones que corresponden a la Península. Según ha explicado, los taxistas tienen más restricciones tanto a nivel tarifario como de movilidad geográfica, por lo que quieren "tener las mismas herramientas para competir".
Si bien Moragues ha indicado que las plataformas Uber y Cabify no tienen incidencia en Baleares, ha subrayado que un grupo de inversión del que forman parte ha comprado 2.500 VTC por 113 millones de euros en España.
Con todo, Moragues ha valorado la sentencia europea que determinaba que Uber debe ser regulada como una compañía de taxis.