El Govern ha informado de que en 2015 se introdujeron en esta finca de Sant Llorenç, en Eivissa, una veintena de machos de tortuga mediterránea y, al comprobarse su buena adaptación, en 2017 se introdujeron las hembras, que pusieron los huevos el pasado mes de junio.
El espacio donde se encuentran los animales es un recinto cerrado con la vegetación necesaria para alimentarse, así como varios lugares donde poder beber y remojarse.
Aparte de las tortugas, el Cofib y el GEN-GOB colaboran en la recuperación de la jineta, el único mamífero carnívoro silvestre que se mantiene en Eivissa y que, tras la desaparición de la marta, es un regulador imprescindible de los ecosistemas y un controlador de los roedores que hay en la isla.
La finca también ha realizado esta primavera una introducción experimental de renacuajos 'capgròs de calàpet', un sapo protegido que dentro de España sólo puede encontrarse en Balears.
La recuperación de fauna silvestre en las Pitiüses está coordinada por la Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, a través del COFIB, y se lleva a cabo gracias a la labor de los agentes de Medio Ambiente y el apoyo técnico de clínicas veterinarias y el Centro de Recuperación de Especies Marinas de Sant Antoni.
