Así lo ha manifestado durante su declaración en el juicio por la pieza 3 de la macrocausa del Palma Arena. Preguntado por la fiscal, Laura Pellón, acerca cómo sabía el presidente que la ópera costaría esa cantidad, Fiol ha contestado que imagina que "por la conversación que tuvo [Matas] con el proyectista".
Esta declaración contradice la versión del ex presidente, que ha mantenido que no había negociado ningún precio previamente. Fiol ha contado que esto ocurrió en una reunión a la que fue citado por Matas en su despacho entre finales de 2006 y principios de 2007.
El ex conseller considera "normal" que el Ibisec gestionara el proyecto porque era "una institución creada para poder agilizar la contratación de proyectos educativos y culturales". En este sentido, ha apuntado que esta institución siempre había tenido una situación deficitaria porque "no genera ningún tipo de ingreso más que el que recibe de fondos públicos", y ha aclarado que el proyecto de la ópera no perjudicó a las obras en colegios porque no provenía del presupuesto ordinario del Ibisec.
El ex conseller también ha corroborado que fue una iniciativa de Matas realizar este proyecto con Santiago Calatrava. Con todo, Fiol ha rechazado que sufriera ningún tipo de "amenaza" o "advertencia" al recibir el encargo del ex presidente.
Fiol ha mantenido que si los informes técnicos y jurídicos no hubieran sido favorables no se hubiera seguido adelante. Además, si bien ha negado que hubiera especiales "prisas" en tramitar el expediente, Fiol ha reconocido que había "interés" en que saliera adelante antes de las elecciones.
"Entra dentro de la lógica de cualquier gobierno cuando llegan las elecciones presentar una hoja de servicios en la que se hayan cumplido los objetivos", ha dicho, para después añadir que "esto es el hábitat de la política".
Finalmente, se ha mostrado convencido de que el proyecto se puede ejecutar todavía porque "administrativamente esta vivo" y "nadie lo recurrió".